Somos lo que comemos

Quienes somos

Una buena alimentación es fundamental en cualquier edad y momento de la vida. Tal vez no estás enfermo, solo necesitas realizar mejoras en tu vida: tener más energía, conocer tu alimentación adecuada para una nutrición óptima. Da igual la edad que tengas, la nutrición y una alimentación con comida real y fresca, en mayor medida, son una apuesta por la prevención de enfermedades. El estilo de vida es fundamental.

Muchas personas tienen miedo de la palabra «dieta«. Dieta proviene del griego dayta que significa «régimen de vida» y se parece más a «estilo de vida» que a la acepción popular que hacemos de dieta en cuanto a privación restrictiva de alimentos= pasar hambre. Pienso que ha llegado el momento de que asumamos que todo el mundo hace una dieta de alimentos, con el resultado de una adecuada nutrición o no. Unos buenos hábitos o no que conducen a un determinado estilo de vida. Y ya está. Luego vemos que cada patrón alimentario es diferente, con sus preferencias e influencias de grupo, familiares o  culturales. Esto implica necesariamente unas selecciones según el grupo de alimentos que integra o evita: unos son veganos, otros son omnívoros, vegetarianos, crudiveganos, crudívoros, paleo, ovo-lacto vegetarianos…y así se van conformando diversas opciones alimentarias que integran ciertos grupos de alimentos o no, según su parecer.

Dicho esto, vemos que se puede comer de muy diversas formas y estar sano, o no estarlo. Todo depende de la habilidad para combinar con equilibrio los alimentos y que proporcionen un adecuado sustrato nutritivo para esa persona concreta. Y aquí vienen muchas confusiones. Porque ser omnívoro, vegetariano o vegano no nos libra de cometer errores en la selección de alimentos que pueden desembocar en carencias. Y eso, si que es un PROBLEMA.

He visto casos de personas que siguen patrones alimentarios límite por nocivos: llenos de ultraprocesados y comida OCNI. objetos comestibles no identificados, «poliester» le llamo desde que prendí fuego a un ganchito y se quedó un gurruño petrificado.

También he visto vegetarianos, o veganos que de pronto me sorprenden tomando alimentos ultraprocesados. Esto no tiene mucho sentido.Porque de entrada la impresión es que se cuidan. Pero no siempre es así. No siempre se selecciona lo que más conviene, sino lo que más apetece. La carga de contenido en la selección está más relacionada con aspectos filosóficos que con conocimientos de alimentación equilibrada.

El apetito juega más malas pasadas que el hambre. El hambre suele ser honesta y directa: hay lentejas ¡pues lentejas! hay un guiso ¡Pues un guiso! El apetito nos hace divagar, porque es más mental que celular. El hambre es nutriente directo a las células cuando comes bien. El apetito suele ser muchas veces picoteo indiscriminado y comida chatarra.
En consulta realizo diferentes formas de abordaje, según el patrón alimentario de cada cual. Se pueden elegir muchos tipos de patrones alimentarios y construir una alimentación sana. Pero de forma consciente y sabiendo lo que hay que hacer, no a lo loco ni por moda. Por las modas es por lo que se pierde el sentido común. Y por lo que se encandaliza la gente con la palabra dieta: porque recibe una atribución errónea. Espero que sanees tu insigtht  o atribución interna de la dieta, que veas como algo que es un potencial de elección y no como socialmente se ha emponzoñado el término, que no tiene nada que ver con su carga de contenido real.

También realizo tratamientos de dietética personalizados enfocados a que la persona supere ciertas patologías que derivan de hábitos incorrectos y/o como estrategia preventiva del desarrollo de ciertas enfermedades como pueden ser la obesidad, la diabetes, el colesterol o el cáncer. Si escribo bien: existen estudios que relacionan la dieta y los nutrientes que aporta a través de los alimentos con un potencial preventivo del ciertos tipos de cáncer. Como verás, no hablo para nada de que la alimentación te cura el cáncer. Aunque he investigado sobre este tema y cada vez más, utilizamos soportes nutricionales específicos en los pacientes de oncología que reciben su tratamiento médico. Como es un tema que si o si se debe valorar de forma individual haciendo historia clínica, no abundaré más.

Amparo Lucas Alba

¡Hola!: Soy Amparo Lucas Alba. Imparto charlas y cursos de divulgación de la nutrición.
Desarrollo una labor de consejo nutricional en consulta privada, trabajando sobre aspectos de la modificación de hábitos de la conducta alimentaria desde 1994. Soy nutricionista-dietista clínica.

 

 

CURRICULUM

  • Graduada en Nutrición Humana y Dietética (UI1, 1ª promoción)
  • Diplomada en trabajo social (UV)
  • Especialista en Alimentación y Salud (UPM)
  • Experto en Nutrición UV/UGR
  • Diploma en Nutrición por el Instituto Superior de Nutrición y Tecnología de los Alimentos, Universidad de Granada

ACTIVIDAD PROFESIONAL

  • Imparte charlas y cursos de divulgación de la nutrición.
  • Desarrolla una labor de consejo nutricional en consulta privada, trabajando sobre aspectos de la modificación de hábitos de la conducta alimentaria desde 1994.
  • Colaboradora de la revista Padres o nones.